Quizás Dios, ese dios con mayúscula, si existe y la mentira más grande que nos han contado es que es hombre, cuando en verdad… es una mujer. Una overly attached girlfriend. Si lo vemos así, entonces tiene un poco mas de sentido, por ejemplo:
Respecto de la misoginia de Dios. Piensa en como tu pareja ve a tus amigas, todas esas impías quieren alejarte de ella, del buen hombre sumiso que eres. Todas quieren hacerte pecar.
Respecto de tus amigos. Básicamente es el mismo principio anterior, tus amigos solo te llevan por el camino del pecado. Es más, “el que quiere ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios” (Santiago 4 verso 4).
Sobre el sábado. Trabajas toda la semana, pero tienes que tener al menos un día en exclusivo para ella.
¿Y el libre albedrío?. Se reduce a ese momento cuando tu pareja te dice: “haz lo que quieras” y sabes que en verdad tienes que hacer lo que ella quiera, de lo contrario, enfrentarás su ira.
Y así por el estilo, como una polola paranoica y manipuladora, te cela, intenta modificar tu conducta de acuerdo con sus propios gustos, alegando que es por tu propio bien. Te aleja incluso de tu familia si esta se interpone en vuestra relación. Cambia tu forma de vestir, tu dieta, te prohíbe alimentos, te hace compartir regularmente con gente que no soportas, cambia tu música, en fin, te convierte en su humilde y sumiso servidor y que es peor, te hace creer que estás haciendo lo correcto, que estuviste equivocado toda tu vida, que vivías en oscuridad, que te hace un favor, te trae a la luz y que debes agradecérselo.
El hecho de que vivamos en un país que dice garantiza libertad de expresión, no quiere decir que tus ideas, creencias o afirmaciones sean sagradas. Tus ideas pueden parecer y ser estúpidas y aunque no lo sean, aun así pueden ser discutidas, rebatidas y refutadas.
Tienes derecho a tener tus ideas o creencias, pero tus ideas no tienen derechos.